ENRIQUE PRESBURGER PARA ENLACE JUDÍO MÉXICO
El objetivo de este artículo, es introducir al lector en el razonamiento de organizaciones terroristas para motivar el escalamiento de un conflicto bélico a través de una guerra de guerrillas. El lector comprenderá que los acontecimientos actuales suelen ser provocados para lograr objetivos determinados ante respuestas predecibles del enemigo.
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El conflicto como un medio para llegar a un fin:
•El aislamiento de Hamás previo al conflicto: Hamás se encontraba previo al inicio del conflicto actual con Israel en su peor momento político desde su nacimiento; sufriendo de bajos niveles de reconocimiento local, aislada de todo organismo y foro multilateral (inclusive dentro de la propia liga árabe), debilitada ante la Autoridad Palestina de Abbas (a quien se aliaron por primera vez por miedo a quedar relegados de la vida nacional palestina) y desligada de Egipto (país que cerró su frontera con Gaza dado que Hamás está ligada, desde su nacimiento, a la Hermandad Musulmana, organización hostil para el gobierno actual del Cairo).
Para Hamás existía un beneficio claro en provocar un conflicto de grandes proporciones para posicionarse nuevamente en el primer plano de la vida palestina. No es casualidad que antes de secuestrar y asesinar con éxito a 3 jóvenes Israelíes civiles, Hamás había realizado ya 64 intentos de secuestro, y que en años recientes la organización se dedicó a invertir fuertes cantidades de dinero en la compra de armamento, el desarrollo de una infraestructura subterránea terrorista, el encubrimiento de lanzacohetes y el perfeccionamiento de su sofisticada campaña mediática. Hamás bien sabe que mediante la provocación de un conflicto bélico de gran magnitud logra instituirse como el símbolo del nacionalismo palestino, lo que le vale el reconocimiento interno por cohesión ante un enemigo común, el realce mediático mundial, y el acercamiento político de gobiernos donantes hostiles al Estado de Israel, como Siria, Irán y Qatar entre otros. Estos tres aspectos de reafirmación, le valen a Hamás su fortalecimiento en el poder y la entrada de cientos de millones de dólares para su clase política.
•Hamás estaba perdiendo fuerza ante el surgimiento de nuevos grupos: Si bien Hamás es el principal responsable de los ataques terroristas continuos, no es el único grupo que los perpetra. Hoy dentro de la franja de Gaza localizamos grupos armados de gran poderío como el brazo militar de la Yihad Islámica en Palestina, el brazo militar del Frente Popular para la Liberación de Palestina, (FPLP), el Frente Democrático (FD), Los Comités de Resistencia Popular (CRP), y las organizaciones bélicas extremistas de Fatah; además, por supuesto, de múltiples células terroristas locales quienes asumen también responsabilidades por los ataques. Asimismo, Israel ha recibido disparos no solo desde Gaza, sino algunos esporádicos desde Líbano, Siria y el mismo Egipto. Esta situación explica la necesidad de Hamás de retomar el protagonismo bélico en contra del Estado de Israel, pues su influencia gubernamental se encontraba debilitada ante el surgimiento de grupos más radicales.
Las tácticas terroristas que se esconden entre líneas:
•Hamás ha buscado claramente la escalada del conflicto: El ejército de Israel intentó evadir por varios días su entrada a pie (infantería) a Gaza, que finalmente fue inevitable debido a los disparos continuos de cientos de Cohetes que Hamás provocó para lograr tal objetivo. De igual manera, el grupo terrorista ha rechazado sistemáticamente múltiples y reiteradas propuestas de cese al fuego realizadas por el Estado de Israel, la Comunidad Internacional, la ONU, La Liga Árabe, Egipto y la misma Autoridad Palestina de Abbas. Asimismo, el discurso de sus voceros como Sami Abu Zohr mantienen una línea de escalamiento del conflicto, a través de reafirmar el posicionamiento de que “Hamás no reconoce el derecho a existir del Estado de Israel”, y que “Toda tregua es una oportunidad de volverse a armar con armas mejores y más sofisticadas hasta la desaparición del Estado de Israel”. Hamás ha condicionado un cese al fuego a demandas inverosímiles en medio de un conflicto bélico, como la creación de un puerto marítimo, un aeropuerto, la definición de aguas territoriales y la apertura de cruces fronterizos sin filtros; además de sus demandas tradicionales de recursos económicos y liberación de miles de presos y activistas terroristas. Es claro que existe una estrategia discursiva y de facto de que el conflicto se mantenga, escale y suba de proporción. Hamás sigue reafirmando su línea como grupo terrorista.
•Hamás se preparó para este conflicto con mucha inversión y antelación:
-La infraestructura terrorista subterránea de Hamás: Hamás se ha dedicado a desarrollar una compleja infraestructura subterránea que hoy se sabe es de cuando menos 31 túneles con cientos de accesos que requieren una inversión millonaria para su desarrollo. Dichos túneles no sólo desembocan en ciudades Israelíes, sino específicamente en escuelas y fraccionamientos residenciales para lograr perpetrar asesinatos indiscriminados de civiles. Estos túneles se usaban también para los secuestros.
-Lanzamiento de Cohetes de Hamás: Para darnos una idea de la sofisticada red de cohetes que posee Hamás, ponemos en perspectiva que la organización ha disparado 2,225 cohetes (corte al 29 de Julio) a la población Israelí, lo cual significa el lanzamiento de 117 cohetes diarios, o bien 5 cada 60 minutos durante las 24 horas del día, durante casi 3 semanas. Se calcula que Hamás tiene de 10,000 a 50,000 cohetes adicionales listos para ser utilizados contra la población civil, buscando infundir un daño psicológico profundo generalizado.
-Los escudos humanos de Hamás: Hoy está oficialmente documentado que Hamás utiliza instalaciones civiles como centros de guerra y terrorismo, con el doble objetivo de destruir y disuadir a Israel de su defensa. Hamás ha utilizado formalmente en este conflicto como escudo al Hospital Al Wafa, el Hospital Shifa, múltiples Mezquitas como Alfaruk, e inclusive las instalaciones de la UNRRA (United Nations Relief and Rehabilitation Agency), perteneciente a la ONU. Asimismo, Hamàs utiliza ambulancias como vehículos de guerra, y disfraces de soldados Israelíes y mujeres árabes para ocultarse y atacar. Estas tácticas son comunes del esquema de “guerrillas” de grupos terroristas a lo largo de toda la historia, y es por eso que los conflictos siempre serán desproporcionados, pues el campo de batalla es en medio de la sociedad civil.
•Hamás busca el desgaste mediático, político y civil del Estado de Israel
-La entrada a pie del Ejército Israelí a Gaza: El Estado de Israel cuenta con el poderío suficiente para bombardear todos los objetivos terroristas desde el aire. La política del ejército Israelí de minimizar la muerte de civiles, obliga a sus fuerzas armadas a entrar a pié, lo que significa la llamada de miles de reservistas que sales de sus trabajos y por supuesto la muerte de soldados entre 18 y 21 años en su mayoría.
-El costo de la guerra para el Estado de Israel : La movilización y mantenimiento de las fuerzas dentro de Gaza, representan gastos de cientos de millones de dólares diarios, además de pérdidas económicas indirectas por los empleos que se suspenden por los miles de reservistas que deben dejar sus trabajos para enrolarse. Por supuesto se suma el golpe a la industria turística que sufre daños incuantificables. Un ejemplo de la magnitud de los gastos de guerra es el “Iron Dome” que intercepta misiles, pues cada obstrucción de un ataque de cohete cuesta al Estado de Israel alrededor de $50 mil dólares. Al 29 de Julio, el Domo ha interceptado 500 cohetes, lo que representa un gasto de $25 millones de dólares.
-Provocación del cierre de cruces Israel-Gaza: Hamàs sabe que Israel no generará un estado de sitio en Gaza (cierre completo de fronteras), y que mantendrá por sus políticas de ética en la guerra los cruces desde su territorio cuando menos parcialmente abiertos. Es un hecho que al día de hoy funciona el cruce de Kerem Shalom, donde han entrado cerca de 980 camiones de Israel a Gaza llevando alimentos, medicamentos, equipamiento médico, diesel para centrales eléctricas, gasolina para los transportes, gas para uso doméstico y se han realizado reparaciones de la electricidad y el agua para la población palestina. Se encuentra también abierto el cruce de Rafiah ofreciendo atención médica. Ambos cruces, han sido blancos de ataques de morteros buscando provocar su cierre total.
-Señalamiento de la Comunidad Internacional: El desgaste más importante que sufre el Estado de Israel, y toda la comunidad judía de la diáspora, es sin duda el surgimiento de discursos y declaraciones antisemitas que derivan en señalamientos mediáticos, manifestaciones, e inclusive ataques violentos alrededor del mundo. El señalamiento mediático indiscriminado suele derivar en antisemitismo. Asimismo tenemos ejemplos de señalamientos formales en organismos multilaterales, como la resolución del Consejo Superior para los Derechos Humanos de las Naciones Unidas -organismo donde por supuesto predominan naciones árabes-, que creó una comisión investigadora internacional para examinar los crímenes de guerra supuestamente realizados por Israel durante la operación en la Franja de Gaza. Este organismo, tiene un historial de centrar sus señalamientos en un 85% sobre Israel a pesar de la existencia de crisis humanitarias en sus propios países.
Conclusión:
Debemos de entender a Hamás como un sofisticado grupo que busca ganarse el derecho de la representación del pueblo palestino a través de tácticas terroristas cuidadosamente planeadas, que han demostrado redituar en canales mediáticos, políticos y sobre todo económicos gracias a las donaciones de gobiernos y sociedades hostiles al Estado de Israel. La escalada del conflicto no es fortuita.
El Estado de Israel, aunque pueda tener conciencia de estar impulsando directamente la popularidad y éxito de Hamás, ha decidido anteponer la vida y seguridad de sus propios ciudadanos, anhelando que esta decisión sea la correcta.
Como seres humanos sin duda debemos aspirar a alcanzar la paz entre ambos pueblos, y considerar seriamente una coexistencia binacional. No obstante, debemos antes desenmascarar las estrategias de los grupos terroristas, para comprender cómo erradicarlos por el bien de ambos pueblos y crear una verdadera agenda de diálogo “tierra a cambio de paz”, mecanismo que ya funcionó con países como Egipto y Jordania.
