SILVIA SCHNESSEL PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – Aunque el brote en el norte se haya extinguido, envió un mensaje inquietante: El frente norte está despertando, tanto en las fronteras con Siria como en las del Líbano, y es dudoso que Hezbolá esté disuadido de actuar de nuevo.
Por Yoav Limor
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Las Fuerzas de Defensa de Israel todavía tienen que declarar oficialmente el retorno a la normalidad, pero los mensajes que Israel recibió de Hezbollah, a través de la FPNUL, indicaron que Hezbollah estaba buscando calma. A pesar del alto precio pagado, el establecimiento de defensa de Israel puede pasar de los recientes acontecimientos en el norte. Israel asestó a Hezbolá un golpe estratégico y golpeó la infraestructura operativa que Hezbollah había establecido en el lado sirio de la frontera en los Altos del Golán, mientras que Hezbollah respondió con un simple golpe táctico contra Israel.
Es dudoso que Hezbolá estuviera de acuerdo con esta caracterización de los acontecimientos recientes. A los ojos de Hezbolá, sufrió un golpe militar y luego dio un golpe militar a cambio. Para Hezbolá, su principal logro fue su capacidad para cobrarse un precio de Israel sin provocar una conflagración a gran escala. Hezbolá también ve tímida la respuesta de Israel el miércoles como prueba de que la disuasión es una calle de dos vías. Ambas partes no están interesadas en la escalada en este momento.
La decisión del escalafón diplomático-seguridad de Israel de abstenerse de una reacción más severa sirve un objetivo inmediato – la calma en la frontera con el Líbano. Al mismo tiempo, los funcionarios israelíes mantienen sus ojos en el objetivo principal – la prevención de la apertura de un frente terrorista activo en los Altos del Golán. Esto fue al parecer el motivo tanto del ataque reportado que mató a Jihad Mughniyeh el 18 de enero como a la focalización de las posiciones militares sirias en la noche del martes en respuesta a los ataques con cohetes en el Monte Hermón temprano en el día.
Tomará tiempo determinar si el mensaje fue recibido y Hezbollah será disuadido de operar de nuevo en los Altos del Golán. La mayoría de las entidades oficiales israelíes creen que la respuesta es no y que la renovación de las actividades de Hezbolá en la zona de Har Dov indica un cambio significativo en la realidad de la seguridad en el norte. Esta es una mala noticia, porque las consecuencias de este cambio son de largo alcance y problemáticaa. La preocupación es que ahora estamos en una pendiente hacia abajo para otra guerra en el norte, más pronto o más tarde.
Aunque ninguna de las dos partes quiera que tenga lugar una guerra así, el ejército israelí debe aprovechar el próximo período de tiempo para impulsar su disposición (sobre todo en el ámbito operacional) para un escenario de este tipo. Deben extraerse enseñanzas tanto de Operación Margen Protector como de los recientes acontecimientos en el norte – por ejemplo, en relación con el uso de vehículos “blandos” en sectores amenazados. Sin embargo, el ejército israelí dijo que el uso de este tipo de vehículos en la zona en la parte inferior de Har Dov no era problemático. Esta es un área que está abierta al tráfico civil y los misiles Kornet utilizados por Hezbollah también habrían penetrado en vehículos blindados y matado a sus ocupantes.
Si bien todo esto es cierto, tenemos que cambiar la forma de mirar el frente norte. Tanto las fronteras con Siria como las del Líbano son ahora no sólo hostiles, sino también escenarios de guerra, lo que requiere un cambio de comportamiento operativo y pensamiento. Dado el actual frenesí en Medio Oriente, no pasará mucho tiempo antes de que ocurra algo, alguien ataca y alguien muere. A partir de ahí, será un camino corto a la siguiente ronda de combates.
Fuente: Israel Hayom
