LEÓN OPALÍN PARA ENLACE JUDÍO MÉXICO

Durante su campaña presidencial Donald Trump (DT) tuvo expresiones de rechazo al mundo islámico y alguna digresión en relación a Israel, esto último para atacar los vínculos de su rival Hillary Clinton (HC) con Wall Street con quien existe una gran influencia de los judíos de EUA. Sin embargo, una vez electo presidente de EUA su propuesta que difundió de prohibir la entrada de inmigrantes musulmanes a EUA desapareció de su página web y reafirmó su apoyo a Israel que fue la tónica de su campaña en la que dejó claro que “iba a reparar las deshilachadas relaciones con Israel, romper el Acuerdo Nuclear con Irán y trasladar la embajada de EUA en Israel de Tel Aviv a Jerusalem, la eterna e indivisible capital del pueblo judío”.

El triunfo electoral de DT resultó “refrescante” para el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu (BN), después de la tensa convivencia de ocho años con el presidente Barack Obama (BO), caracterizada por desacuerdos políticos y conflicto de personalidades, sobre todo porque BO sintió como una afrenta personal el rechazo de BN al Acuerdo Nuclear de Irán con el Grupo 5+1, firmado en julio del 2015, que frena el acceso iraní a la Bomba atómica. BN presentó públicamente el Acuerdo en el Congreso de EUA, sin conocimiento de la Casa Blanca en marzo del 2015. DT consignó que el Pacto con Irán es uno de los peores pactos que un país ha hecho en la historia y criticó en su campaña la política exterior de BO que ha fortalecido a países hostiles como Irán y ha alejado a los aliados de EUA. Consideró que al quitarle las sanciones económicas que pesaban sobre Irán por su Programa nuclear, se extendió una recompensa al principal patrocinador estatal del terrorismo de 150 mil millones de dólares a cambio de nada; Irán en una década, plazo de vigencia del Acuerdo, volverá a ser una amenaza para el mundo.

Poco después de anunciar su candidatura en junio del 2015, inició una cruzada de apoyo a Israel sabedor de que esa nación es el principal aliado de EUA en el Medio Oriente y de la gran influencia política y económica de la comunidad judía en EUA.

En relación al conflicto entre Israel y los palestinos, los asesores de DT distribuyeron durante su campaña documentos oficiales que indican qué es lo que el candidato piensa sobre el mismo, entre otros puntos de vista se señalan los siguientes:
– La solución de dos Estados es imposible mientras los palestinos no reconozcan a Israel como un Estado Judío y mientras no abandonen la incitación a la violencia contra los judíos.

– No acepta el argumento de que Israel está “ocupando” Cisjordania y que la posible retirada israelí de territorios de esta última se ejecutaría hacia límites que serían definidos como defendibles. Para firmar un Acuerdo de Paz, EUA quiere que Israel tenga seguridad y, por lo tanto, se debe evitar cualquier acción que la debilite; Israel es vital para EUA, es el primer bastión de defensa para Occidente, lo que significa que constituye el ámbito físico de la defensa estratégica de todo el Medio Oriente. De aquí que el propio BO renovara en septiembre pasado el Acuerdo de Ayuda Militar de EUA a Israel otorgado por el Presidente George Bush por 30 mil millones de dólares con vencimiento en el 2018. El nuevo Acuerdo es por un monto de 38 mil millones en los próximos 10 años, BN quería 45 mil millones. Israel ha sido el mayor receptor de ayuda militar de EUA con 124,300 millones a precios actuales, desde la Segunda Guerra Mundial.

– Estaría dispuesto a ayudar a las partes para llegar a un Acuerdo de Paz, no obstante, no las presionaría para alcanzarlo. Como está previsto en los Acuerdos de Paz de Oslo de 1993, las negociaciones entre Israel y los palestinos tienen que ser directas, sin condiciones previas. DT se opondrá a cualquier movimiento de la ONU para imponer soluciones.

– Reprueba la cultura de odio a los judíos en la que son educados los niños palestinos, si se quiere tener un Acuerdo de Paz “esto tiene que acabar”. Destaca que no existe equivalencia moral entre los palestinos e Israel; Israel no nombra plazas públicas en honor de terroristas, ni paga a niños para que apuñalen a la gente al azar. No se puede negociar la paz con una sociedad donde son héroes quienes asesinan y los tratan como mártires.

David Friedman (DF), asesor de DT, mencionó durante la campaña presidencial que aprobaría la anexión a Israel de partes de los territorios de Cisjordania y apoyaría la construcción de asentamientos judíos en los “territorios ocupados” porque entiende que el gobierno de Israel tiene un compromiso con sus conciudadanos de Judea y Samaria que se mudaron a esa zona.

DT ha dicho que espera poder orquestar el Tratado final de Paz entre Israel y los palestinos que resolvería “la guerra que nunca termina”; en este sentido, el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mohamed Abbas (MA) carece de legitimidad política en la ANP, de aquí que no tendría un mandato para signar la paz con Israel.

La reacción de los palestinos a la política proisraelí de DT no se ha hecho esperar; el líder político de Hamas, Khaled Mashaal, nacido en Ramala, Cisjordania, residente en Qatar, amenazó a EUA y a Israel, indicando que no habrá estabilidad en la región sin los derechos de los palestinos, declaración que supuestamente implica la destrucción de Israel. Por su parte Riyad Manzur (RM), representante palestino ante la ONU, también amenazó con vengarse de EUA en ese organismo si DT cumple sus promesas de trasladar la embajada de EUA de Tel Aviv a Jerusalem. De acuerdo a RM, el traslado implicaría una violación a la Resolución del Consejo de Seguridad de la ONU y a la Resolución 181; aunque puso en duda que DT cumplirá con la medida señalada, afirmando que otros candidatos presidenciales de EUA habían prometido el traslado, empero, no lo hicieron.

El traslado de la embajada de EUA a Jerusalem es importante para Israel como un reconocimiento tácito de que es su capital histórica, también lo es para reafirmar la conexión histórica judía con los lugares santos de Israel que la Unesco la vinculó solo a los palestinos.

En este marco, el Ministro de Educación de Israel, Naftali Bennett, comentó que “la idea de un Estado Palestino ha terminado con la elección de DT para la presidencia de EUA”, así, se pone fin a años de negociación, existe una coyuntura para que Israel descarte la creación de Palestina. ¿Cuál sería la alternativa?… ¿un Estado Binacional para Israel y palestinos? En la práctica es difícil eliminar a un Estado Palestino; no se pueden negar las aspiraciones de los árabes palestinos que viven en Cisjordania y en Jerusalén Oriental, lo que es reprochable es la violencia que han desatado para lograr sus objetivos, y ¿los palestinos de Gaza gobernados por terroristas? No pueden ser considerados en negociaciones con Israel en tanto persistan en borrarlo del mapa.