Enlace Judío México e Israel – Lou Andreas-Salomé nació en 1861 en una familia judía, en San Petersburgo y murió en 1937, en Gotinga, Alemania. Muchos la consideran la mujer más seductora del siglo XIX y principios del XX. Se dedicaba a seducir a hombres a los que luego abandonaba. Volvió loco de amor a Nietzsche. Wedekind la retrata en “La Caja de Pandora” que llevó Berg a la ópera. Sinopoli le dedicó una ópera.

Nació en una familia judía. Su padre era un general judío del ejército ruso. Salomé fue la única hija, junto a cinco hermanos. En busca de una educación más allá de la típica para una mujer en ese lugar y época, a sus diecisiete años sedujo al predicador alemán Hendrik Gillot, veinticinco años mayor que ella para que le enseñara teología, filosofía, religión y literatura francesa y alemana. Cuando Gillot se enamoró tanto de Salomé que planeó divorciarse de su esposa y casarse con ella, Salomé y su madre viajaron a Zurich para que ella pudiera ingresar en la universidad.

Su madre la llevó a Roma cuando tenía 21 años. En un salón literario de la ciudad, Salomé conoció al escritor Paul Rée y le sedujo. Simultáneamente también sedujo al amigo íntimo de Rée, el filósofo Friedrich Nietzsche que entonces tenía 38 años (17 más que Salomé). Los tres viajaron con la madre de Salomé a través de Italia.

Nietzsche se enamoró locamente de Salomé y le pidió que se casara con él y tuvieran un hijo juntos. Su respuesta fue negativa. “Yo soy libre y no me ato con nadie”.

Salomé no aceptó el matrimonio con Nietzsche y a cambio propuso a ambos hombres enamorados unirse en un trio viviendo juntos y desarrollando un trabajo intelectual. Nietzsche no aceptó la propuesta. Los tres se hicieron juntos una famosa foto en la que Salomé los domina con un látigo.

Salomé y Rée se trasladaron a vivir a Berlín. Nietzsche se quedó totalmente destrozado. Su mejor amigo se iba a vivir con la única mujer que él había amado. Le escribió varias cartas de amor que Salomé no respondió. Las energías del amor frustrado las canalizó Nietzsche en su obra más genial “Así hablaba Zaratustra”. En esta obra cambia completamente la imagen del látigo. Dice “Si vas con mujeres no te olvides del látigo”. Esa frase es un antiguo proverbio árabe que muchos musulmanes aplican a diario hoy en día.

Nietzsche había iniciado el descenso al abismo. Poco tiempo después entro en fase de locura aguda causada por la sífilis y dos años más tarde murió.

Salomé y Rée vivieron juntos varios años en Berlín hasta que ella se casó con el profesor de lingüística Carl Friedrich Andreas. A pesar de su oposición al matrimonio, Salomé y Andreas permanecieron casados desde 1887 hasta la muerte de Andreas en 1930. Pactaron una relación de amor libre.

Salomé fue una escritora prolífica, y publicó varias novelas, obras y ensayos. Fue también una creativa feminista. Estando casada tuvo romances con el periodista alemán Georg Leedor, el poeta austro-húngaro Rainer Maria Rilke, y los psicoanalistas Sigmund Freud y Viktor Tausk, entre otros. Da cuenta de muchos de ellos en su libro Lebensrückblick.

Su relación con Rilke fue particularmente cercana. Salomé era quince años mayor. Se conocieron cuando él tenía veintiuno. Fueron amantes durante varios años y se escribieron hasta la muerte de Rilke.

Otro de los que cayeron bajo el embrujo de Lou Salomé fue el escritor Franz Wedekind. Sus obras sobre Lulu están inspiradas en ella. En realidad Lou es Lulu. Escribió “La Caja de Pandora” justo después de ser seducido por Lou Salomé en París en 1894. Años después Alban Berg transformaría el libro de Wedekind en su genial ópera Lulu.

Lou Salomé dio un giro en su vida tras participar en 1911 en el congreso de la Sociedad Psicoanalítica de Viena.

Se instaló en Viena para iniciarse en el psicoanálisis. Empieza su formación bajo la dirección de Freud que se convertirá en su amigo y confidente.

Lou adquirió fama mundial. Fue la primera psicoanalista distinguida y la única mujer que Freud aceptó en él “círculo interno” de la Sociedad Psicoanalítica de Viena. Los 25 años siguientes Lou se dedicará completamente al psicoanálisis, como psicoanalista y como investigadora.

Salomé tuvo como pretendientes a las más grandes inteligencias de su tiempo. Fue una gran seductora que no se comprometía con nadie y que quería sentirse siempre libre. Salomé solía decir “Mi obligación es estar libre de obligaciones”. Jamás sintió el deseo de maternidad.

Lou Andreas-Salomé adquirió una notable popularidad tras la publicación, en 1951, de la primera edición alemana de su autobiografía, “Mirada retrospectiva”, que sirvió a Liliana Cavani para hacer su película “Más allá del bien y del mal” con Dominique Sanda en el rol de Salomé.

La otra película sobre Salomé (El día que Nietzsche lloró) data de 2007, dirigida por Pinchas Perry. Está basada en la obra de ficción “When Nietzsche Wept” (1992) del psicoanalista norteamericano Irvin D. Yalom, quien simula el encuentro del fisiólogo y psicólogo austriaco Josef Breuer, colega y maestro del padre del psicoanálisis Sigmund Freud, con el revolucionario filósofo Friedrich Nietzsche.

Salomé

En la primavera de 1882 la joven y deslumbrante Lou Salomé organiza una misteriosa cita con Josef Breuer, célebre médico vienés, con el objetivo de salvar la vida de un tal Friedrich Nietzsche, un atormentado filósofo alemán, casi desconocido pero de brillante porvenir, que manifiesta tendencias suicidas. Breuer, influido por las novedosas teorías de su joven protegido Sigmund Freud, acepta la peligrosa estrategia que Salomé le propone: psicoanalizar a Nietzsche sin que éste se dé cuenta.

Los protagonistas principales de la película son Salomé, Nietzsche, Sigmund Freud y Josef Breuer.

No es una película genial pero es interesante porque todos los diálogos son copias de textos de Nietzsche. Lo mejor de la película es la actuación como Salome de la seductora y fascinante Katheryn Winnick que aborda el papel.

Salomé es la protagonista de la ópera “Lou Salomé” de Giuseppe Sinopoli, estrenada en 1981 en la Bayerischen Staatsoper de Munich. La obra es un análisis psicológico de la personalidad de Salomé a través de la música. Se presenta a Salomé con la enfermedad psicológica de la incapacidad de conocerse a sí misma lo que para Kierkegard es una de las formas más terroríficas de enfermedad mental. Una buena parte del texto está tomado de obras de Nietzsche. La ópera merecería ser representada más a menudo. Desgraciadamente Sinopoli murió de un infarto mientras dirigía en la Opera de Berlín. Existe una excelente grabación de las suites N.º 1 y 2 con Sinopoli dirigiendo a la Orquesta de la Radio de Stuttgart. Los cantantes son Lucia Popp y José Carreras.

Salomé será siempre un ejemplo de mujer rebelde e independiente, de mujer libre que va a su aire y hace siempre lo que quiere sin importarle los demás. Ella sólo piensa en sí misma y seduce por diversión o capricho sin estar enamorada. Se parece mucho a la Carmen de la novela de Merimee y la ópera de Bizet. “Carmen ha nacido libre y libre morirá”.

Pedro Beltrán es autor del libro “Historia de la Sexualidad”.


 

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