Enlace Judío – El ministro de extrema derecha, Bezalel Smotrich, uno de los miembros más importantes del gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu, afirmó este miércoles que Israel debe “arrasar” la aldea palestina de Huwara, en Judea y Samaria (Cisjordania), días después de los disturbios de israelíes extremistas que incendiaron decenas de viviendas y vehículos, informó Haaretz.

“La aldea de Huwara debe ser arrasada. Creo que debe hacerlo el Estado de Israel [y] no, Dios no lo quiera, particulares”, dijo Smotrich, cuando se le preguntó por qué había dado “me gusta” a un tuit del jefe adjunto del Consejo Regional de Samaria, Davidi Ben Zion, en el que que pidió arrasar la aldea.

El tuit, que fue eliminado posteriormente, se escribió tras el asesinato de dos hermanos israelíes, Hillel y Yagel Yaniv, que pasaban en su vehículo por la aldea el domingo. Tras el ataque, cientos de israelíes extremistas entraron en Huwara, arrojaron piedras e incendiaron viviendas y vehículos en disturbios que duraron más de cinco horas. Quemaron al menos 15 hogares y 25 autos, 9 familias fueron evacuadas.

Smotrich, ministro de Finanzas y responsable de la Administración Civil en Judea y Samaria (Cisjordania) también pidió una respuesta “desproporcionada” a la violencia palestina y negó la existencia del terrorismo judío.

El martes, el comandante del Mando Central de las FDI, general de división Yehuda Fuchs, calificó el ataque a los palestinos en Huwara como “pogromo”. Advirtió que los enfrentamientos de extremistas israelíes contra soldados de las FDI podrían causar muertes y acusó a los extremistas de sembrar el terrorismo.

Veintidós expertos israelíes en derecho internacional pidieron el lunes a la Fiscal General de Israel investigar a Smotrich y a otros dos miembros de la Knéset que apoyan a israelíes extremistas en los asentamientos de Judea y Samaria (Cisjordania) por “incitar a crímenes de guerra”.

El miércoles, la fiscal general Gali Baharav-Miara y el fiscal del Estado Amit Aisman autorizaron investigar al diputado Zvika Fogel del partido Otzmá Yehudit, por incitación al terrorismo.

En una entrevista radiofónica, Fogel respaldó este lunes los disturbios contra palestinos Huwara, afirmando que “el efecto de disuasión que se logró ayer tras estos llamados ‘pogromos’ no se había logrado en Judea y Samaria desde la Operación Escudo Defensivo“, en referencia a la amplia operación llevada a cabo por el ejército israelí en 2002, durante la Segunda Intifada.

Huwara quemada y clausurada, eso es lo que quiero ver”, dijo Fogel.

En respuesta a los reportes sobre la investigación, el presidente de Otzmá Yehudit y ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, acusó a la Fiscalía del Estado de sesgo contra la derecha, alegando que en el pasado se negó a tomar medidas contra políticos de izquierda que hicieron declaraciones.

Hay “una ley para la derecha y otra para la izquierda. Esta es una prueba clara de la necesidad de la reforma judicial” que promueve el gobierno, afirmó.

La diputada Limor Son Har-Melej, también del partido Otzmá Yehudit estuvo en Huwara el domingo por la noche y dijo que lo hizo para “apoyar las justas demandas de cientos de habitantes de Judea y Samaria que protestan y exigen seguridad”.

En su carta, los juristas afirman que “todos los comentarios mencionados implican un apoyo por adelantado [en los casos de Ben Zion y Smotrich], un apoyo en tiempo real [en el caso de Son Har-Melej] y una justificación a posteriori [en el caso de Fogel], y equivalen a incitación a cometer ataques similares en el futuro”.

La carta exige detener y procesar a “todos los alborotadores judíos de Huwara de inmediato y tratar el caso con la misma severidad que los actos terroristas cometidos por palestinos, todo ello sujeto a la ley sobre derechos humanos y de acuerdo con el derecho internacional”.

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