Enlace Judío – Estados Unidos condenó enérgicamente el llamado del ministro de Finanzas de Israel, Bezalel Smotrich, para arrasar la aldea palestina de Huwara en Judea y Samaria (Cisjordania), tras los disturbios de judíos extremistas que incendiaron decenas de viviendas y vehículos, en respuesta al asesinato de dos hermanos israelíes, Hillel y Yagel Yaniv, informó Haaretz.

“La aldea de Huwara debe ser arrasada. Creo que el Estado de Israel debe hacerlo, no, Dios no lo quiera, particulares”, dijo Smotrich cuando se le preguntó por qué le había dado “me gusta” un tuit del jefe adjunto del Consejo Regional de Samaria, Davidi Ben Zion, en el que pidió arrasar la aldea “hoy mismo”.

“Quiero ser muy claro al respecto”, dijo el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price. “Estos comentarios fueron irresponsables. Fueron repugnantes. Y al igual que condenamos la incitación palestina a la violencia, condenamos estos comentarios provocadores que también equivalen a incitación a la violencia”.

“Pedimos al primer ministro Netanyahu y a otros altos funcionarios israelíes rechazar pública y claramente estos comentarios. Condenamos, como hemos hecho siempre, el terrorismo y el extremismo en todas sus formas, y seguimos instando a que se apliquen las mismas medidas de rendición de cuentas por acciones extremistas, independientemente del origen de los autores o de las víctimas”, añadió Price.

Durante una entrevista con CNN, el embajador de Israel en Estados Unidos, Michael Herzog, dijo: “A pesar de que Israel ha sufrido recientemente una ola de terribles atentados contra sus civiles, no es en absoluto política israelí y va en contra de nuestros valores arrasar aldeas civiles”.

Smotrich tiene previsto visitar Washington a finales de este mes para reunirse con dirigentes de la organización Israel Bonds. No ha solicitado celebrar reuniones con la administración Biden, según funcionarios estadounidenses e israelíes.

Un portavoz de Israel Bonds declinó responder a preguntas sobre si le preocupa recibir a Smotrich, señalando en cambio que su conferencia estará cerrada a los medios.

A pregunta expresa, un portavoz de AIPAC dijo que la organización no anuncia reuniones futuras con funcionarios.

“Seguimos sumamente preocupados por la continua violencia en la región. Instamos a Israel y a la Autoridad Palestina a que eviten más pérdidas de vidas civiles. Hemos dejado clara nuestra opinión: nos oponemos a declaraciones o acciones de cualquiera de las partes que incrementen las tensiones”, dijo un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de EE.UU.

William Daroff, director general de la Conferencia de Presidentes de las Principales Organizaciones Judías de EE.UU., agregó: “Los comentarios de Smotrich sobre Huwara, como dijo Price, fueron irresponsables y repugnantes”.

Daroff confirmó que su organización no celebró ninguna sesión con ministros del partido Hatzionut Hadatit durante la conferencia sobre Israel el mes pasado, y no planea reunirse con Smotrich durante su visita oficial a Estados Unidos.

Las Federaciones Judías de Norteamérica, una organización que representa a 146 federaciones judías y 300 comunidades judías independientes, expresó recientemente preocupación por la reforma judicial del gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu. Con respecto a las declaraciones de Smotrich dijo: “Es obvio decir que estos comentarios no representan nuestros valores”.

La Liga Antidifamación dijo: “Es inexcusable que [Smotrich] incite a la violencia masiva contra los palestinos como forma de castigo colectivo. En lugar de condenar los disturbios en Huwara y actuar para apaciguar la situación, Smotrich vuelve a utilizar una retórica violenta y antiárabe”.

“Los comentarios de Smotrich y sus colegas contradicen los valores judíos e israelíes de respeto a la vida humana y al Estado de Derecho. Todos los dirigentes deben denunciar inequívocamente estos comentarios de odio y dejar de incitar a la violencia”, agregó.

Un portavoz confirmó que los funcionarios de la ADL no se reunirán con Smotrich.

El Comité Judío Americano dijo en un comunicado que “condena este reprobable llamamiento a la violencia y al castigo colectivo por parte de un ministro del gobierno. Representa lo contrario de los valores y tradiciones del Estado de Israel“.

Anteriormente, el grupo dijo que las declaraciones de funcionarios de Hatzionut Hadatit “suscitan serias preocupaciones”.

En 2019, la organización advirtió del ascenso de la extrema derecha en la política israelí.

T’ruah, un grupo rabínico de derechos humanos, pidió a la administración Biden negar la entrada de Smotrich a Estados Unidos, señalando su autoridad sobre el órgano del gobierno israelí en Judea y Samaria (Cisjordania).

“Los comentarios de Smotrich son aún más peligrosos ahora que ante una anexión de facto, el gobierno israelí lo ha convertido de hecho en el gobernador de Judea y Samaria (Cisjordania), con una amplia supervisión sobre la mayoría de las áreas de la Administración Civil”, dijo la directora general de T’ruah, la rabina Jill Jacobs. Hizo un llamamiento a todos los miembros de la administración Biden para que rechacen cualquier reunión con Smotrich si se le permite entrar al país, e instó a los grupos judíos estadounidenses a que lo denuncien y se nieguen a relacionarse con él.

Cuando se le preguntó si Estados Unidos permitiría la entrada a Smotrich, un funcionario del Departamento de Estado respondió: “No podemos especular sobre si alguien puede o no tener derecho al visado. Cuando una persona solicita una visa estadounidense, un funcionario consular revisa el caso y determina si el solicitante puede optar a esa visa en base a la ley estadounidense”.

Veintidós expertos israelíes en derecho internacional pidieron el lunes a la Fiscal General de Israel, Gali Baharav-Miara investigar a Smotrich y a otros dos miembros de la Knéset que apoyan a israelíes extremistas en los asentamientos de Judea y Samaria (Cisjordania) por “incitación a crímenes de guerra”.

Activistas israelíes de derechos humanos sostienen que Smotrich debe ser añadido a la lista de sanciones de Estados Unidos de acuerdo con la Ley Magnitsky de Responsabilidad Global por los Derechos Humanos de 2016, destinada a castigar a personas de todo el mundo acusadas de graves violaciones de los derechos humanos mediante la prohibición de ingreso a Estados Unidos y el bloqueo de propiedades.

Afirman que ha incitado públicamente al genocidio contra el pueblo palestino, según la definición de la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio. Los activistas citan sus comentarios anteriores sobre los palestinos, en los que abogó por la transferencia de población, pidiendo implícitamente el uso de la violencia contra los palestinos que no acepten a Israel como potencia soberana.

Smotrich intentó además que se disminuya la pena de prisión para extremistas israelíes responsables del incendio provocado en 2015 contra la familia Dawabsheh en Judea y Samaria (Cisjordania), al tiempo que justificó el asesinato en 2016 del adolescente palestino Mohammed Abu Khdeir.

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