El rey David nos habla sobre la energía de las letras hebreas y de cómo mediante sus combinaciones se creó todo lo que existe. Él declara lo siguiente:

“Mediante la palabra del creador se crearon los cielos y con el aire de su boca (su palabra), todos sus ejércitos”.

Nuestros sabios de bendita memoria, basados en la sabiduría divina de la Kabalá, nos enseñan que incluso antes de que Boré Olam (el creador del mundo) creara todos sus mundos, hizo las letras del alfabeto hebreo, e introdujo dentro de cada una de ellas un poder espiritual, una energía, una fuerza y una santidad muy especial. 
 

Dios les concedió a las letras hebreas el poder divino de la creación, la capacidad de formar toda clase de cosas tanto físicas como metafísicas en el universo. Esto significa que, así como él puede crear, las letras también pueden hacerlo, pues en cada una de ellas está contenida esa facultad divina. 

 
Dios hizo las letras hebreas a partir de la nada, para que de ellas se pueda crear todo lo que hay. Cada letra tiene el potencial de establecer, de formar, de instituir, de construir a partir de ella cualquier cosa.
Es por eso que Dios, a partir de las letras creó todos sus mundos, Por ejemplo, este mundo lo creó mediante la letra he ה, mientras que el mundo venidero lo creó con la letra yod י.
De esto y mucho más nos explica el Rab. Yosef Zonana para Enlace Judío.

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