El servicio de seguridad Shin Bet investiga el asesinato de cuatro personas, incluido un candidato a la alcaldía en la localidad de Abu Snan, mientras el crimen en las comunidades árabes continúa rompiendo récords, informó The Times of Israel.

El tiroteo se produjo horas después de que el primer ministro Benjamín Netanyahu reiterara su llamado a involucrar al servicio de seguridad en la lucha contra el crimen en las ciudades árabes, tras el asesinato del director general del municipio de Tira un día antes.

El ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, cuyo ministerio supervisa a la policía, calificó a las bandas armadas en el sector árabe como “organizaciones terroristas con enormes presupuestos y cientos de miles de armas a su disposición, incluidos millones de balas, cargas explosivas y lanzagranadas”.

Ben Gvir advirtió que tales “milicias” pronto dirigirán sus ataques contra el Estado de Israel y pidió una vez más el establecimiento de una guardia nacional para prevenir la delincuencia local.

Señaló además que hace meses la policía bajo su supervisión solicitó el arresto administrativo de seis líderes de pandillas sin presentar cargos, una medida utilizada con frecuencia por las autoridades militares en Judea y Samaria (Cisjordania), pero la solicitud fue rechazada por la fiscal general Gali Baharav-Miara. Ben Gvir afirmó que cinco de los seis líderes estuvieron involucrados posteriormente en asesinatos o intentos de asesinato.

La diputada Tally Gotliv (Likud) arremetió contra Baharav-Miara por no autorizar las detenciones administrativas y la acusó de interferir con el gobierno diciendo que “la sangre de las víctimas está en sus manos”.

El asesinato del martes fue perpetrado en un olivar a las afueras de Abu Snan, en un área de difícil acceso, según el Canal 12, lo que llevó a los investigadores a especular que los cuatro podrían haber sido emboscados por alguien que conocían, o fueron perseguidos.

Una de las víctimas fue identificada como Ghazi Sa’ab, candidato a la alcaldía en las próximas elecciones municipales, quien había lanzado su campaña dos horas antes de su muerte. La policía no descarta la posibilidad de que el asesinato haya sido perpetrado por elementos criminales infiltrados en el gobierno local.

Sa’ab era exoficial de las FDI y de la Guardia Fronteriza, y en los últimos años tenía un negocio en Abu Snan, informó Haaretz.

Las otras víctimas fueron identificadas como sus familiares Zahir al-Din Sa’ab, Amir Sa’ab, así como con Salman Halbi de Yarca. Los cuatro pertenecían a la minoría drusa.

Los líderes drusos anunciaron una huelga en instituciones comunitarias y culparon a la policía y al gobierno por la falta de seguridad en el norte, pidiendo al primer ministro tomar medidas firmes contra el crimen.

“Hoy, todos los ciudadanos de la comunidad árabe en Israel viven con un miedo terrible, un gran dolor y una profunda angustia. Cada uno de los asesinados es un mundo entero para sus familiares y seres queridos”, dijo el presidente Yitzhak Herzog el martes por la noche. “Esta es una emergencia que requiere medidas decisivas por parte del Estado para erradicar el crimen y la violencia y evitar más pérdidas de vidas”.

Según la ONG Iniciativas Abraham, 156 miembros de la comunidad árabe fueron asesinados desde principios de año.

Reproducción autorizada con la mención siguiente: © EnlaceJudío