Anula Ratnayaka, de 49 años, pasó 10 años como cuidadora en Israel hasta que fue asesinada por terroristas de Hamás en el asalto del 7 de octubre al Kibutz Be’eri, The Times of Israel recogió su historia.
Durante una década, trabajó con familias que la consideraban una de las suyas.
El Sri Lanka Daily News informó que Anula fue asesinada a tiros tras lograr esconder a Ettie Morado, la mujer israelí a la que cuidaba.
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El informe señala que “la señora mayor de la casa que fue rescatada ha dicho: ‘Estoy ciega. Anula era mis ojos. Me escondió debajo de la cama y se adelantó para ver qué pasaba’”.
El 28 de octubre, el cuerpo de Anula fue repatriado a Sri Lanka y enterrado en el suburbio de Kelaniya, en el norte de Colombo, informó India Today.
En una publicación de Facebook, Nimisha K Varghese escribió: “Llevamos 5 años de amistad. Eres mi mejor amiga con quien puedo acudir y hablar sin presentación… el idioma o el país no eran una barrera… has sido mi mejor amiga desde que llegué al Kibutz Be’eri… Nunca te olvidaré… gracias por todo, por quererme, por todo el apoyo y todo”.
En la publicación de Facebook, se puede ver a Anula en fotos saliendo con amigos en una sucursal de la cadena de helados “Golda” en Israel, y en lo que parece ser el entorno muy familiar de un salón de actos de un kibutz.
El sitio de noticias BNN Breaking escribió que Anula era una residente de la ciudad de Eriyawetiya “cuyas esperanzas de una vida mejor se vieron trágicamente cortadas a pocos kilómetros de su casa en suelo extranjero”.
El artículo se refería a Anula como una “isla hija en el corazón del conflicto”. Afirmó que Anula “no era simplemente una estadística” en el derramamiento de sangre de un conflicto intratable, sino que “era una mujer de 49 años, madre de dos hijos, que trabajó incansablemente durante una década en Israel, lejos de los paisajes familiares de su ciudad natal, Eriyawetiya”.
El artículo agregaba: “en el gran esquema de la guerra, Ratnayake puede representar una sola vida perdida, pero también es un emblema conmovedor del costo del conflicto”.
El 25 de octubre se celebró un homenaje a Anula en Petaj Tikva. Amigos y seres queridos (israelíes, habitantes de Sri Lanka y otros de lugares más lejanos) vinieron a presentar sus respetos.
En una publicación de Facebook, la israelí Efrat Vaknin habló de su amor por Anula, quien cuidó de su difunta suegra Aliza antes de su muerte hace unos años. Efrat escribió que incluso después de la muerte de Aliza, conducían hasta Be’eri para visitar a Anula y Etti, la anciana a la que cuidaba. Efrat escribió que Anula es quien creó el grupo de WhatsApp “Familia” y que “éramos una familia en todos los sentidos”.
Efrat la describió como una mujer que amaba a las personas y la vida y siempre anteponía a los demás a ella misma. También escribió que extraña los mensajes de Anula los viernes deseándole “Shabat Shalom” y la dulzura que transmite a todos los que se cruzan en su camino.
“No podemos enviarte fotografías y videos de Cleo [la hija de Efrat], y no me enviarás fotografías de tus viajes por el kibutz y los eventos del kibutz, y no podremos beber tu té ni las deliciosas galletas que hacías. Ya no podemos abrazarte… Anula, te extrañamos mucho”.
Yael Gilboa, sobrina de Aliza, también elogió a Anula como “devota y con un corazón de oro, también cuidaba de los gatos del jardín, y probablemente también de los pájaros y otras criaturas… Estamos de duelo con la familia y los amigos de Anula y les enviamos nuestras condolencias. No la olvidaremos”.
El el 7 de octubre, una cuidadora filipina también salvo a la mujer que cuidaba sobornando a un terrorista de Hamás que había irrumpido en su casa en la frontera de Gaza con los ahorros que había dispuesto para viajar a su país dos días después.
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