Enlace Judío México e Israel – Como seres humanos, nunca nos sentimos satisfechos. Constantemente estamos en busca de nuevas experiencias, emociones, de nuevos aprendizajes; hasta en lo físico, queremos un coche nuevo, una casa más grande, queremos cambiar de guardarropa y hasta de look. Nos cortamos el pelo, nos dejamos crecer la barba, adelgazamos o nos compramos aretes nuevos. Queremos estar en cambio y normalmente todo esto nos hace sentir un placer inmediato, un reencuentro efímero con nosotros mismos, pero muchas veces ese placer termina, pasa y continuamos en búsqueda de otras experiencias, como quien dice, volvemos a empezar.

Cuando una persona se da cuenta que todos estos cambios no son los que brindan felicidad, voltea a su interior y comienza a hacerse preguntas más profundas sobre sí mismo. ¿Quién soy? ¿Qué quiero? ¿Hacia dónde quiero dirigir mi vida? ¿Qué valor real tiene esto que hago? ¿Para qué lo hago? ¿Para qué estoy en este mundo?

Y es justamente en este punto de quiebre que la responsabilidad sobre nosotros mismos se asoma. Nos hace reflexionar sobre nuestra vida y nos hace trabajar por alcanzar una meta trascendental, o por lo menos, cuestionarnos sobre tener un objetivo significativo.

120 es una novela de ficción basada en hechos reales y apoyada en las milenarias escrituras del Antiguo Testamento, sobre dos amigos que encuentran el sentido de la vida de forma espectacular.

Como lector, podrás dudar de lo que habrá después de la muerte pero al leer 120, te darás cuenta que la forma de ser feliz en este mundo es dedicando tu vida trabajando en tu más alto propósito.

¿Para qué estoy aquí?

Esta pregunta fundamental es puesta de lado por gran parte de la población mundial, por lo que al final de nuestras vidas solo pasamos por el mundo evadiendo mirar las necesidades del alma y arrancando lo que servía para nuestro propio beneficio sin dejar nada que favorezca a las futuras generaciones, lo cual es el propósito primordial de la creación del mundo.

Fijarse en las herramientas con las que contamos, nuestra pasión y las características que nos diferencian de los demás, son las claves para redescubrir nuestra razón de ser. Esa es la forma más fácil de acceder y conectarnos con la fuente de nuestra creación.

Quiénes son los autores

Jacko Shemaría

Jacko se ha desempeñado como un gran empresario, siempre consciente de mejorar la calidad de vida de su alrededor.

Es fundador de TAD (Torá a domicilio) en donde un gran número de personas se ha acercado a sus raíces gracias al esfuerzo de muchos maestros, quienes han impartido más de 20 mil clases para el crecimiento espiritual de sus alumnos.

A partir de ser diagnosticado con mieloma múltiple de alto riesgo, se dio cuenta que no tenía temor de pasar por ese camino que quizá para muchos podría significar un enorme dolor. Para él, la enfermedad se convirtió en un detonador de mayor cercanía con Dios, por lo que fue escribiendo ensayos y reflexiones durante el año de tratamiento.

Buscó transmitir que en ocasiones, no nos damos cuenta que poseemos la verdadera felicidad y que ésta no depende de nada externo, ni siquiera de las circunstancias. Así nace esta novela, como un cúmulo de sentimientos plasmados en letras.

Orly Cohen

Con enorme gusto por la escritura desde niña, Orly escribía cuentos y guiones infantiles imaginando personajes.

Comunicóloga egresada de la Universidad Iberoamericana y con más de 15 años de experiencia en el arte literario, trabajó en diferentes editoriales y después lo ha hecho por su cuenta desde hace 10 años.

Orly fue también Codirectora de prensa de Monte Sinai durante dos años. (2009-2010)

En 2017 concluyó el libro de investigación de instituciones filantrópicas, De la mano con mi hermano, editado por Comité Central.

En 2020 se unió con Jacko para escribir 120.

Y tú, ¿para qué estás aquí?

Puedes encontrar el libro en Amazon versión física y electrónica, tanto en español como en inglés.


 

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